Estas sesiones serán perfectas para ti...

Si ha tenido que emigrar o cambiar de país. La vida de una persona que tiene que renunciar a su cultura, costumbres y gastronomía por cualquier circunstancia ya sea económica, trabajo, familia, o porque Dios le ha dicho que tiene que ir a una nueva tierra, cambia totalmente.

Adaptarse a un nuevo vocabulario, costumbre, iglesia o ausencia de amigos puede ser una etapa difícil en todo ser humano. Esta etapa marca un nuevo rumbo, que muchas veces nos sentimos estancados: gestión de tiempo, dificultad para hacer nuevos amigos y adaptarte a cambios, etc. Pero Dios también tiene un plan para tu vida, al permitir esta circunstancia.

Averigüemos por qué esta etapa afecta tanto a su vida:

¿No te parece curioso que en las escrituras cuando se habla del extranjero, también se hable de los huérfanos y las viudas? vemos en Deuteronomio 10:17-18 “Porque el Señor vuestro Dios es Dios de dioses y Señor de señores, Dios grande, poderoso y temible que no hace acepción de personas ni acepta soborno. Él hace justicia al huérfano y a la viuda, y muestra su amor al extranjero dándole pan y vestido.” Para Dios estos tres grupos son importantes y no los dejará a un lado.

Una persona que deja su país de nacimiento lucha con:

  • Adaptación: vocabulario, culturales, papeleos, leyes, etc.
  • Soledad: está lejos de su familia
  • Sentirse en tierra de nadie: Ni es de su país, ni tampoco del que reside.
  • Vulnerabilidad: Nadie que les tienda una mano ante cualquier necesidad
  • Cargas familiares: No llegar a fin de mes o dejar de comer para enviar dinero a su familia.

¿Cómo puede la consejería Bíblica ayudarle?

Estas sesiones le ayudarán a orientarse y desarrollar estrategias para cambiar lo por venir. El Señor protege a los extranjeros que viven entre nosotros. Dios tiene un cuidado especial hacia los extranjeros. "Cuida de los huérfanos y las viudas, pero frustra los planes de los perversos." Salmos 146:9 NTV.

Es importante saber que no estás caminando en solitario, sino que Jesús como extranjero entiende cada una de tus circunstancias. Él siempre tiene un plan, y detrás de esta etapa que estás viviendo hay un aprendizaje para moldear tu carácter. Adaptarte no es fácil, pero el Señor desea mostrarte sus promesas en el camino.

A través de la consejería Bíblica según sea el caso, se podrá:

  • Romper con patrones culturales: reglas o normas que en el nuevo país no existen y afectan.
  • Sentirse perdido/a : encontrar el propósito en Dios del «por qué estoy aquí, si puedo estar mejor en mi país»
  • Soledad: familiares a miles de kilómetros, sin amigos, no soy aceptado/a en mi iglesia, etc.

¿Cómo serán las sesiones?

Las sesiones tienen una duración de 50 minutos. La primera sesión tendrá 30 minutos extras totalmente gratuito. Tomaremos primeramente los datos, hablaremos sobre ti y las circunstancias que estés atravesando. Lo más importante es que te sientas a gusto y en confianza, que sientas total libertad a la hora de hablar. Mi ética profesional es que lo que hablemos en la sesión allí se queda. Luego se definirán objetivos, para finalmente llevar a cabo un plan de acción.